
Todo tiene su tiempo...tiempo de reir, tiempo de llorar...
Tiempo de nacer..tiempo de morir...
Eclesiastés 3, lo indica claramente...
Tómate un tiempo para agradecer a Dios por su inmenso amor hacia tí.
Por su misericordia eterna y por la provisión que te da.
Agradecer por su Hijo enviado para RECONCILIARTE con él.
Sólo Jesucristo es quien te libera de tus cargas...
Señor,
Te agradezco por tu amor y por tu misericordia
Gracias por ser mi amigo.
Amén.